martes, 9 de agosto de 2011

Una osa con dos crías se localiza en la frontera gallega

Cuaderno de campo en junio y julio

En los últimos años se está produciendo una progresiva recuperación de la subpoblación occidental de osos cantábricos, con un nivel reproductor esperanzador estimado en veinte osas con crías al año. Actualmente, esta subpoblación tiene 160-180 osos que habitan los montes del Suroccidente asturiano y el Alto Sil leonés.

Algunos de estos osos recorren los bosques de Os Ancares de Lugo. Pero lo que antes eran visitas espaciadas, en los últimos tiempos, y especialmente desde el pasado verano, se está convirtiendo en una presencia osuna permanente. Así lo están comprobando los vigilantes de la Patrulla Oso de la FOP en Galicia.

Desde el verano de 2010, estamos viendo mucha más presencia e indicios de oso en zonas de Lugo que en temporadas atrás. Los avistamientos e indicios no solamente son comprobados por los guardas de la Xunta y por nosotros, también los paisanos de los pueblos han visto al oso cruzando carreteras y en orillas de los ríos. Se ven más indicios que antes en los concellos de Navia de Suarna y Cervantes, los más oseros de Galicia, pero también se mueven osos por montes donde no era tan habitual verlos, como en los concellos de A Fonsagrada, Ribeira de Piquín o Negueira de Muñiz. Estamos triplicando mensualmente el número de fichas de presencia de oso, comparando con temporadas atrás. Las fichas recogen avistamientos, indicios -como huellas, excrementos o pelos- y también daños en colmenas y árboles frutales.

Habitualmente detectamos ejemplares solitarios. Pero en la tarde del 10 de junio cambiaron las cosas. Nos juntamos para ir a trabajar y decidimos ir por el límite con León. No habíamos bajado del coche para empezar a rastrear, cuando Justo se pone a mirar con los prismáticos desde la ventanilla y, al poco, dice todo sorprendido: ¡veo crías jugando! Con nervios miramos los dos y vimos con claridad a los dos oseznos y a la osa. La hembra era preciosa, de tamaño grande y tonalidad pardo grisácea, con manchas blancas a los lados del cuello y una raya de pelo negro desde las agujas a la nuca. Uno de los oseznos era pardo oscuro y el otro más clarín; no tenían manchas aparentes. Fue uno de los días más emocionantes de los ya muchos que llevamos trabajando en la Fundación. Por fin una osa con crías a pocos centenares de metros de los montes gallegos. Coordinados con guardas de León y Lugo, la estuvimos observando durante seis días. Se desplazaba y se alimentaba escarbando y moviendo piedras, mientras los oseznos jugaban, daban volteretas y subían a los árboles. Después, cambió de monte y se dejó de ver.

Antonio del Pueblo y Justo Mayo, (Cervantes y Navia de Suarna, Lugo)


Fuente original

4 comentarios:

Chucho dijo...

Noticias así querríamos leer todos los días. Buen trabajo.

jag dijo...

Fantástica noticia. Enhorabuena!!
Felicidades por el blog.

Un saludo,
Juan

Anónimo dijo...

Es cuestión de tiempo que las osas se asienten en las magníficas morteiras y abesedos que aún se conservan en la vertiente gallega (incluyendo Balouta y Suárbol, en la vertiente occidental pero pertenecientes por caprichos del destino a León), al igual que (con más tiempo) en los montes gallegos y bercianos al sur de la A6, donde vagan algunos ejemplares solitarios.
Saludos. Miguel. Trabadelo.

Medved dijo...

Pues la verdad es que es una noticia esperanzadora para la población osera asentada en Galicia ya que aunque esta hembra este a caballo de las dos comunidades autonomas sus hijas podrían pasar definitivamente al otro lado.

Concretamente que una cría fuera de color pardo oscuro y la otra mas clara me da buena espina. Aunque no es matemático, las hembras suelen ser de colores claros y los machos oscuros...

Que sigan las buenas noticias!