Récord del programa de cría en cautividad del lince con 24 cachorros

Aún hay tres hembras que podrían incrementar el número de ejemplares

La actual temporada de cría en cautividad del lince ibérico, la séptima desde que en 2005 se logró el primer nacimiento de este felino en un centro cerrado, ha batido su récord de productividad con el nacimiento de 36 cachorros, de los que sobreviven 24.

El coordinador de este programa, Iñigo Sánchez, ha destacado que, además, de este histórico número de cachorros, que se puede incrementar porque quedan tres hembras con posibilidades de parir, esta temporada ha logrado otros hitos que permiten consolidar los objetivos demográficos y genéticos de este proyecto.

El anterior récord de productividad de linces ibéricos cautivos se logró en 2009, cuando sobrevivieron 17 cachorros, cifra que bajó el año pasado a ocho supervivientes.

La cría en cautividad del felino en mayor peligro de extinción del planeta ha logrado este año la primera supervivencia de un cachorro en el centro de cría de Silves, en el Algarve portugués, donde habían fallecido todos los linces nacidos, casi todos alumbrados por hembras primerizas o inexpertas.

En este centro queda por parir Biznaga, que ha fijado otro hito este año al volver a entrar en celo tras perder su primera camada, un comportamiento que hasta ahora no se había comprobado en el lince ibérico pero sí en otros felinos, ha explicado Sánchez.

Aunque ha recomendado prudencia hasta que crezcan los cachorros de la cohorte 2011 -cuyos nombres comenzarán con la letra h siguiendo la serie alfabética iniciada en 2004- ha destacado que este año se ha confirmado otro hito, el de la primera adopción de un cachorro, protagonizada por Castañuela.

Esta hembra del centro de cría de La Olivilla (Sierra Morena) ha adoptado un cachorro de la camada que Brisa abandonó en las instalaciones de El Acebuche (Doñana) y que técnicos del programa de cría en cautividad trasladaron con urgencia para que fuese adoptado por su nueva madre, que lo cría sin novedad junto a sus dos cachorros, paridos el día anterior.

Esta "adopción" de cachorros abandonados es crucial para la cría en cautividad pues los abandonos de un cachorro o de toda la camada son frecuentes entre linces primerizas o inexpertas.

Otro hito logrado este año ha sido el nacimiento de un lince cuyos padres padecían la Enfermedad Renal Crónica (ERC) en grado avanzado, lo que confirma que esta dolencia, de la que han muerto nueve felinos desde 2010, no impide la reproducción.

También han sido históricos los dos primeros partos cuádruples registrados este año; aunque el primero, protagonizado por Fernandina, hembra primeriza de La Olivilla fue prematuro por lo que nacieron muertos sus cuatro cachorros, el segundo, alumbrado por Aliaga en El Acebuche, se desarrolla con normalidad.

Sánchez, quien trabaja en la reproducción en cautividad del lince ibérico desde el inicio de este programa, hace una década, confía en que estos hitos logrados en este año "excepcional" aumenten con la primera reproducción de este felino en el Zoobotánico de Jerez de la Frontera, donde se han reproducido con éxito otras especies amenazadas, como el ibis eremita.

"Estamos muy contentos pero no podemos lanzar las campanas al vuelo porque la cría en cautividad está sometida a muchas vicisitudes y es frecuente la muerte de cachorros en los primeros meses de vida; pero la temporada ha comenzado muy bien, nos ha sorprendido el gran número de cachorros nacidos y éste será un gran año para la conservación del lince ibérico", ha destacado Sánchez.

Ha subrayado la importancia de que este récord de productividad se haya logrado en "un momento tan oportuno" como el actual, en el que la entrada en funcionamiento del quinto centro de cría en cautividad del lince ibérico, el de Zarza de Granadilla, en Extremadura, y las futuras reintroducciones de este felino en la naturaleza demandarán nuevos ejemplares.

Fuente: Elpais.com

Informacion actualizada en el apartado de nacimientos de la web del ex-situ.