Ganaderos de Carranza ceden cuatro ovejas para atraer la atenciónde los depredadores y así poner freno a los ataques a rebaños
SERGIO LLAMAS
BARAKALDO
Las batidas realizadas se han saldado con un avistamiento y ninguna captura
El llamado 'corral centinela' fue ubicado a principios de año en un prado carranzano
Los ataques de lobos detectados en Las Encartaciones a comienzos de año, que se saldaron con seis ovejas muertas y otras cinco heridas en Carranza, han empujado al Departamento de Agricultura de la Diputación a probar un sistema para estudiar la entrada de este depredador en Vizcaya y evitar así nuevas incursiones. Se trata del denominado 'corral centinela', un espacio vallado de unas dos hectáreas de extensión en el que se deja cebo vivo con el que tentar a los canes. «Para eso los ganaderos nos han cedido cuatro ovejas de escaso valor -se trata de ejemplares viejos- que se han ido dejando en el redil. El lobo ha entrado en tres ocasiones y ya ha acabado con tres de ellas», explicaron responsables de la institución foral.
El 'corral centinela' fue ubicado a comienzos de año en un prado de Carranza cercano al poblado donde se había avistado anteriormente una pareja de lobos. «Lo hemos instalado a petición de los propios ganaderos», aclararon desde el Departamento foral de Agricultura. Desde allí cumple una doble función: por un lado, aportar información a los investigadores para documentar la entrada de estos depredadores en Vizcaya, y por otro, reducir las pérdidas de los ganaderos. «Las tres ocasiones en que han matado a estas ovejas en los últimos meses han servido para evitar ataques a rebaños mayores», celebraron.
El objetivo del corral no es actuar de trampa para capturar al lobo, que a diferencia de la oveja de reclamo puede escapar fácilmente del mismo, sino averiguar cuál es su vía de entrada y hacia dónde se dirige desde allí. Para eso el recinto está sembrado de caminos y zonas de arena en las que permanecen visibles las huellas de estos cánidos. Expertos de Base Gorria analizan luego las pruebas y documentan la presencia de estos animales.
Sin capturas
Aunque ya se han realizado varias batidas, de momento estas no se han saldado con la captura de ningún animal. «En una ocasión se divisó un lobo, pero no se le pudo abatir a causa de la niebla», explicó la portavoz del sindicato agrario EHNE en Carranza, Olate Arrate. «En esas batidas participan los propios pastores que tienen licencia de caza y sólo pueden hacerlo los fines de semana. Al final, si el ataque se ha producido un lunes es muy difícil que obtengan resultados», recordó.
Para los expertos, el ataque a once ovejas en Carranza, ocurrido en enero de este año, fue un caso aislado. Antes del mismo ya se habían documentado otras dos incursiones de lobos en el entorno de Las Encartaciones. Ocurrieron el pasado mes de noviembre, en los municipios de Carranza y Arcentales, con una diferencia de sólo dos días. Entonces acabaron con nueve ovejas. «Los técnicos que han estudiado los animales muertos han confirmado que al menos hay dos lobos diferentes andando por Carranza», afirmó Arrate, quien teme que en la época de cría estos animales puedan decidir establecerse en los alrededores.
Los responsables de la Diputación insisten en que la presencia del lobo en Vizcaya es poco menos que anecdótica, ya que su entrada se produce fundamentalmente desde la provincia de Álava, donde sí tiene asentamientos. Así lo demuestra la diferencia de ataques entre ambas provincias en los últimos años. Frente al centenar de animales muertos y heridos que se han documentado en Vizcaya entre los años 2006 y 2008, en Vitoria la cifra es de 240 sólo en el pasado año.
Entre las zonas de actuación del lobo en territorio vizcaíno destacan el entorno del Gorbea y la comarca de Las Encartaciones. Aunque su presa preferida es la oveja, también se han dado casos de ataques a terneros, potros, cabras o corderos. El pasado mes de marzo, la Diputación rechazó elaborar un plan específico para esta especie precisamente por la falta de una población representativa en la zona.
Fuente: elcorreodigital.com
2 comentarios:
Yo sigo sin entender cómo un animal que se supone en extinción como es el lobo ibérico se permite cazar. A lo mejor soy muy ignorante no sé.
Mamen, no te tortures, todos somos ignorantes, o al menos es como nos tratan las administraciones.
En Álava por ejemplo, los lobos no existen, no estan catalogados de ninguna manera, ni en peligro ni en las ordenes de vedas. Por tanto no es un animal cinegetico, no se puede cazar. Solo se puede "controlar". Es un eufemismo, para decir que se hace lo que se quiere, cuando y como se quiere.
El lobo a nivel peninsular esta en franco ascenso, y no es una especie amenazada, pero a nivel autonomico, o provincial, lo es, y mucho.
Para que os hagais una idea, es como si se permitiera cazar aguiluchos laguneros porque estan en franco ascenso en las zonas proximas y sus poblaciones no corren peligro. Eso si, en Álava hay 3-4 parejas, y obviamente a nivel provincial esta protegido.
Pues si a los laguneros les gustasen las ovejas, no os preocupeis que tambien le zumbarían, asi de hipocritas son las administraciones.
En fin, que os voy a contar que no sepais... ¿O hay alguien que no este quemado con el asunto?
Gracias por tu opinion Mamen, siempre es alentador saber que sigue habiendo personas que estan en desacuerdo con estas politicas.
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