«Villarina»: año nuevo, refugio nuevo

La osezna, devuelta a los montes de Somiedo en noviembre, estrena encame en 2009, come sin problema y no realiza hibernación estricta

Villarín (Somiedo),

V. DÍAZ PEÑAS

«Villarina», la osezna encontrada por unos turistas en una cuneta en Somiedo y devuelta a su hábitat el pasado mes de noviembre, ha comenzado el año cambiando de refugio. Así lo confirmaron ayer desde la Viceconsejería de Medio Ambiente, quienes señalaron que el esbardo sigue en buenas condiciones de salud y moviéndose por la zona sin problema. «La mayor novedad ha sido que el animal ya no se refugia de las nieves en el primer encame que encontró. Ahora está en un nuevo refugio, pero siempre dentro de la misma zona en la que fue soltada», apuntaron desde la Viceconsejería dirigida por Belén Fernández.

La osezna, en los bosques nevados de Somiedo, en una de las últimas imágenes del animal. Reproducción de Vicente Díaz Peñas.

La osezna, devuelta a los bosques después de pasar varios meses recuperándose de problemas de salud, sigue estable y no está realizando, al menos hasta ahora, una hibernación estricta. Con la llegada de las primeras nieves de noviembre, el animal se refugió al abrigo de unas rocas para resguardarse de las inclemencias, pero siguió saliendo para comer. Ahora, a principios de 2009, los encargados de vigilar el estado y los movimientos del animal han constatado que «Villarina» sigue gozando de buena salud y sale constantemente al bosque. Según se apuntó ayer desde la Viceconsejería, se ha avistado al animal el pasado sábado, el domingo y también el lunes. «Ahora con la nieve es difícil verla, pues se resguarda en el nuevo refugio. Aun así, el sistema de radio marcaje nos indica que sigue en la misma zona donde fue soltada», apuntaron fuentes de Medio Ambiente.

Desde el Principado se mantiene que la actitud de «Villarina» es la misma que llevan a cabo otros ejemplares de esta especie que sigue en peligro de extinción. «El comportamiento que está teniendo en estos primeros pasos del invierno es el esperado. Está viviendo como lo hace cualquier otro ejemplar, resguardándose de las inclemencias y aprovechando el buen tiempo para salir a comer», matizan.

«Villarina» también parece haber comenzado este nuevo año con apetito. El dispositivo de vigilancia ha constatado que el animal se mueve principalmente para buscar alimento. No obstante desde la Viceconsejería se apunta que esto tampoco debe suponer un handicap, ya que en la zona donde fue soltada hay alimento de sobra para que pueda pasar sin problemas mayores el invierno.

Fuente: Ine.es