El oso pardo incautado en enero en Villablino (León) murió descerrajado a disparos

PALENCIA, 4 May. (EUROPA PRESS) -

Después de conocerse que el Seprona había incautado, en enero de 2010, una piel de oso pardo a una persona en la zona de Villablino (Villablino), Ecologistas en Acción se personó en las diligencias para poder actuar en las mismas.

El Juzgado solicitó un informe a la Universidad de Oviedo, para conocer las causas de la muerte y demás información pericial, y el mismo, elaborado el 26 de febrero de 2010, aseguró en sus conclusiones que el animal "recibió dos disparos de postas, uno con posta más fina, a mayor distancia y desde atrás y otro disparo fronto-lateral derecho, con posta más gruesa que impacto en el rostro, pecho y costado derecho del animal a unos 15 metros y posteriormente fue rematado de un disparo en la zona del corazón con una bala de cartucho de escopeta, probablemente del calibre 12".

Además, se afirmaba que "parece poco probable que la piel tuviese menos de cinco años ni más de 20" y que el oso tendría "entre dos y tres años de edad, que se corresponde a un ejemplar recién emancipado o desarrollando una vida individual", según informaron a Europa Press fuentes de Ecologistas en Acción.

A pesar de algunas de las contradicciones del denunciado y de los testigos en las diligencias, incoadas por otros delitos y no por este asunto del oso, como son las diferencias en la forma en que la piel del oso había llegado a su poder y la antigüedad que le daban a la misma, el Juzgado se vio obligado a cerrar el caso por la prescripción del mismo.

Según el Código Penal, el caso estaba prescrito por la antigüedad en los restos de la muerte del animal en relación con las penas que pueden imponerse para este tipo de delitos. Además, "para sorpresa de Ecologistas en Acción", el Juzgado tuvo que devolver la piel del oso al denunciado, precisamente también por motivos legales.

Para Ecologistas en Acción, estos hechos demuestran que "no puede bajarse la guardia de la conservación del oso pardo y menos en zonas especialmente conflictivas de furtivismo tradicional, donde hay que actuar sin ningún tipo de tibiezas y con total contundencia" y también que "la Junta de Castilla y León continúa con los mismos problemas de hace 17 años, a pesar de sus planes, leyes, decretos y, sobre todo, de las cantidades invertidas de forma discreccional".

Fuente: europapress.es